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BUSCADOR DE PERLAS
Gênesis 13.8

 

«Así que Abram le dijo a Lot: "No debe haber pleitos entre nosotros, nientre nuestros pastores, porque somos parientes. Allí tienes toda la tierra a tudisposición. Por favor, aléjate de mí. Si te vas a la izquierda, yo me iré a laderecha, y si te vas a la derecha, yo me iré a la izquierda." Lot levantó la vista y observó que todo el valle del Jordán, hasta Zoar,era tierra de regadío, como el jardín del Señor o como la tierra de Egipto. Asíera antes de que el Señor destruyera a Sodoma y a Gomorra. Entonces Lotescogió para sí todo el valle del Jordán, y partió hacia el oriente. Fue así comoAbram y Lot se separaron. Abram se quedó a vivir en la tierra de Canaán,mientras que Lot se fue a vivir entre las ciudades del valle, estableciendo su campamento cerca de la ciudad de Sodoma. Los habitantes de Sodoma eran malvados y cometían muy graves pecados contra el Señor.Después de que Lot se separó de Abram, el Señor le dijo: "Abram,levanta la vista desde el lugar donde estás, y mira hacia el norte y hacia el sur,hacia el este y hacia el oeste. Yo te daré a ti y a tu descendencia, parasiempre, toda la tierra que abarca tu mirada."»

 

Yo voy a guiar a una persona para que venga hacia donde yo estoy: "vení donde yo estoy; más; ahora pegamos la vuelta, vení hacia donde yo estoy, caminá."

 

1) "Si los velos se rompen tomaré mi bendición"

'Velo' en la Biblia es lo que cubre, lo que tapa, lo que impide, lo que nos limita a ver la bendición. Cuando el diablo no te tapa las bendiciones, te mete un velo para que no veas las bendiciones que Dios ya te dio. Dios ya nos bendijo con todas las bendiciones. ¿Cuántos creen eso? Pero no las tomamos porque no las vemos, porque tenemos una venda, tenemos un velo. Y la Biblia dice en Ezequiel, que hay gente mirada por el enemigo para poner velos mágicos. Dice Ezequiel 13, "ay de las que cosen velos mágicos."

 

En la antigüedad los falsos profetas lo que hacían era poner un velo, le daban a la persona una palabra: "te va a pasar esto", le sacaban el velo pero la mente quedaba oprimida y atada, quedaba hechizada, quedaba enjaulada; y eso es lo que le pasa a la gente que tiene velos en su mente. Pablo dice que el diablo lo único que hace es sembrar velos en toda la gente para que la gente no vea la gloria del Señor

 

Si se rompe el velo tomaré mi bendición.

 

Acá tenemos a Abraham y a su sobrino Lot. Dice que llegan a un lugar y estaban tan prósperos que se separaron. ¿Saben qué quiere decir Lot? Quiere decir 'velo'. Abraham era un hombre de fe; fe y velo no pueden caminar juntos. A la gente de fe Dios le va a sacar todos los velos de al lado para que les resplandezcan las bendiciones que Dios ha prometido. Hoy nos vamos a ir de aquí con los velos rotos y vamos a ver la bendición de salud, la bendición económica, la bendición para la ciudad, la bendición familiar. Porque a la gente de fe, todos los Lot Dios nos los saca de encima. Lot significa velo, y representa a la gente que tiene una venda en su mente y no pueden capturar sus bendiciones. Las características de la gente que tiene los velos son varias:

 

Se alejan de su fuente

Lot era prosperado porque estaba al lado de Abraham, porque Dios bendecía a Abraham y los que estaban con él eran bendecidos. Pero como Lot tenía un velo, se creyó que Dios lo bendecía a él por él, cuando Dios nunca le había hablado a Lot. Entonces la gente con velo se alejan de la gente buena, se alejan de la gente que te bendice, se aleja de los lugares positivos, se aleja de la gente que es fuente de bendición. Porque te pone un velo, y en vez de alejarte de la gente negativa te terminas alejando de la gente que tiene fuentes de bendición.

 

Hoy leía de Onesíforo; era un amigo de Pablo que llegó a Roma y buscó a Pablo por toda Roma; no había mail, no había Internet, no había teléfono, no había nada. Hasta que lo encontró en la cárcel.

Onesíforo sabía que Pablo era su fuente, y Onesíforo dijo: "si yo he sido bendecido es porque me conecté con este hombre que está bendecido." Entonces cuando el diablo le pone velos a la gente, se terminan alejando de buenos lugares y de buenas personas. Pierden las fuentes de bendición.

 

La gente con velos pelea

¿Qué hizo Lot? Empezó a discutir: "acá no entramos todos..." Pablo dijo: "evita las discusiones", porque la gente peleadora está vendada, no pueden tomar las bendiciones, siempre están discutiendo, quejándose, siempre están negativos.

 

La gente con velos toma decisiones tontas

Miren lo que hizo Lot: no solamente se alejó de Abraham, no solamente discutió con su fuente, sino que dijo: "no entramos todos, con tantas ovejas..." Abrahan le dijo: "¿para dónde querés ir?"; le dio la opción. ¿Y qué hizo Lot? Miró el valle y dijo: "se parece al Edén que Dios creó... yo me voy para acá." Esa tierra no era parecida al Edén; esa tierra estaba pegada al lado de Sodoma; porque la gente con velo confunde lo malo con lo bueno y lo bueno con lo malo; y toman decisiones tontas. Decís, "Bernardo: ¿por qué tomo decisiones que me hacen daño? ¿Por qué siempre me equivoco? ¿Si yo no soy tonto...?" Es que el enemigo te ha puesto una venda, te ha puesto un velo. Y en esta noche lo vamos a romper en el poder del Señor.

 

Miren Sansón: era juez, tenía el pelo largo, era fuerte. Un día se enamora de Dalila y le dice: "¿bebé, me decís cuál es el secreto de tu fuerza?" Sansón le dice: "si me hacen dos trenzas pierdo la fuerza." Y se duerme. Llaman a los filisteos; le hacen las trenzas y cuando vienen los filisteos para tomarlo, Sansón se despierta y los mata a todos. Entonces viene Dalila de nuevo... "¡¿por qué me mentiste Sansón?!" Y él le dice: "si me hacen un remolinete, ahí pierdo las fuerzas (versión mía)" Y llamaron a los filisteos, y Sansón se despierta y los mata. Va de vuelta Dalila y le dice: "me engañaste otra vez, ¡decíme!" Este Sansón era tonto, eh... ¿por qué no veía que Dalila le quería cortar el pelo? ¿No se daba cuenta? Porque Sansón tenía una venda, y cuando vos tenés una venda que el diablo te puso, vos pensás que lo bueno es malo y que lo malo es bueno, y tomás decisiones tontas que te terminan llevando a Sodoma.

 

La gente con velos nunca ve el poder de Dios

Dios destruye Sodoma; dice que Lot se va con sus hijas a una cueva, y las hijas lo emborrachan, tienen incesto y quedan embarazadas del papá (porque las hijas decían que no había hombres... ves que viene de la antigüedad eso). Nunca, en todos los capítulos que aparece Lot, jamás oró a Dios; nunca le pidió nada a Dios, nunca oyó a Dios... ¿Por qué? Porque la gente que tiene un velo no puede ver el poder de Dios; dicen: "yo sé que Dios es poderoso", "Bernardo, yo sé que Dios liberta, yo sé que Dios prospera, pero no lo veo, no lo puedo experimentar." Porque el enemigo es un especialista en poner velos mágicos. Ahora; cuando Jesús es clavado en la cruz, en el templo había un velo colgando de arriba hacia abajo que separaba el lugar santo del lugar santísimo, que era el lugar donde nadie podía entrar. Y cuando Jesús muere en la cruz, ese velo se rasga para siempre. "¿Qué quiere decir eso, Bernardo?" Que todas las vendas, los velos, las imposibilidades con las que el diablo te ha hechizado, han sido rotas en el poder de Jesucristo. En esta noche vamos a invocar la sangre de Jesucristo y todo velo, toda venda que nos ha hecho tomar malas decisiones, que nos ha hecho perder cosas, que nos ha hecho pelear, serán rotas, y tomaremos las bendiciones que Dios nos ha prometido.

 

Abraham representa la fe, Lot el velo. Fe y velo nunca caminan juntos. Abraham representa los que no tienen velo. ¿Qué pasa cuando Dios te rompe el velo? Paso a paso llegás a la meta. ¿Qué hizo Abrahan? Dice que cuando Lot se fue para Sodoma, él se fue para la tierra prometida. ¿Llegó a la tierra prometida? No; pero puso un pasito más cerca, y después otro pasito más cerca. Yo quiero decirte que Dios te va a romper los velos y, paso a paso, poco a poco volverás otra vez a soñar, volverás a prosperar, volverás a tener el hogar que siempre quisiste, volverás a tener paz, volverás a salir de la droga, de los vicios, del alcoholismo, paso a paso volverás a llegar a la tierra prometida.

 

Jesús dijo: "¿ves ese monte?, si tu fe es como la semilla, vas a mover el monte." Cuando vos agarrás una semilla con la mano es difícil agarrarla, y cuando la agarrás parece que no tenés nada... así es la fe, vas poco a poco. La gente te dice: "no tenés nada..." "Esperá; la semilla está creciendo paso a paso; donde hoy estoy no es donde Dios me va a establecer; donde hoy estoy es el punto de partida hacia donde voy, porque Dios me prometió que veré su gloria. Y aunque hoy me falta mucho, paso a paso, poco a poco llegaré a ver la bendición."

 

2) Cuando el velo es roto voy por más

Dice el texto que Lot habitaba, pero Abraham acampaba. Lot habitó; dijo: "acá me quedo y acá me muero"; pero Abraham dijo: "acá estoy acampando, estoy de pic-nic; hoy estoy acá, y mañana estaré más allá"; en el trabajo de hoy estoy acampando, porque me voy para uno mejor, y para otro mejor; porque Dios acampa alrededor de los que acampan. Yo quiero decirte que, en la crisis que estás pasando, no seas como Lot y habites, sino que acampes. "Hoy estoy en un momento difícil, hoy estoy en duelo, hoy paso injusticia; pero te digo algo diablo: acá no me quedo a vivir; vas a ser mi alfombra diablo; acá yo acampo, y mañana me mudaré al lugar espacioso que Dios me prometió." ¡Gloria a Dios!

 

3) El velo se rompe paso a paso

¿Cuántos estamos yendo paso a paso? Se están riendo de vos; no pasa nada, poco a poco centímetro a centímetro, paso a paso voy por más, estoy acampando. Donde hoy vivo es temporal porque pronto acamparé en lugar espacioso de pastos verdes, de aguas de reposo, y el bien y la misericordia me seguirán. Prepará la ropa de pic-nic porque vas a pasar por las aguas y no te ahogarás, pasarás por el fuego y no te quemarás.

 

4) Cuando se rompen los velos escucho a Papá

¿Cuántas veces Dios le habló a Lot? Ninguna; porque tenía un velo. Hay gente que tiene velo y le decís: "viste la gloria de Dios que hubo en la reunión...", y te dicen: "yo no la vi..."; "viste la revelación que soltó hoy" "...nooo, ¿qué es eso?", "¡viste el Espíritu Santo!", "¿dónde se sentó?", te dicen. Están envelados. Le tiramos quinientas revelaciones y después vienen y dicen: "¿me hace una oracioncita?, ¿tiene una palabrita para mi, pastor?" No, estás con velo. Pero los velos se van a romper y vas a llegar a la cima, vas a ver las bendiciones, y vas a oír a Dios.

 

Estaba el pastor Toni Campoy -un pastor norteamericano- y fue a predicar a una iglesia; y antes de predicar lo agarra el pastor con cinco o seis líderes, y le dice: "pastor, bienvenido a nuestra iglesia; queremos orar antes de que usted predique." En una sala, empiezan a orar: "Padre, bendice al pastor; que dé una palabra..." y le toca orar a un viejo y dice: "Padre bendice, Señor gloria, Padre bendice a John Smith, Padre bendice a John Smith, que quiere dejar a su esposa y a sus tres hijos adolescentes, Padre tócalo a John Smith..." Y mientras el pastor estaba ahí pensaba: "¿qué ora esta persona? ¡Tienen que orar por mí que voy a predicar!", pensaba el pastor Tony Campoy. Y dice: "Padre, toca a John Smith, el que vive en... ¿dónde vive? Ah sí, vive en Pasco 243, 2do B; Padre..." Y entonces Tony Campoy dice, "¡este está loco!, le dice la dirección a Dios, como si Él no supiese." Y estaba algo enojado Tony Campoy... "Padre toca, Pasco 243..." La cosa es que empieza la reunión; predica Tony Campoy; cuando termina, se sube al auto y se va. Cuando va manejando, ve a un hombre con una valija caminando. De pronto el pastor para y le dice: "súbase al auto." Siguen viaje y el hombre le dice: "yo soy pastor"; "ah, qué bien", le dice Tony Campoy. "¿Y cómo es su nombre?" "John Smith". Ahí nomás pegó la vuelta con el auto... "¿¡Qué hace usted!? No va a dejar a su esposa y a sus tres hijos adolescentes..." El hombre se queda helado... "¿¡Usted es profeta!?" "Claro" "¿Y usted sabe donde vivo...?" "¡Sí: en Pasco 243, 2B"! El hombre se puso a llorar. Tony lo llevó a la casa. "Baje", y viene la mujer llorando... "Acá le traje a su marido; llame a sus tres hijos; Dios se lo mostró", así le dijo; y no le dio más detalles... ¡y se reconciliaron!

 

Yo quiero decirte que Dios nos va a hablar de las maneras más extraordinarias, más insólitas; porque mis ovejas oyen mi voz y me siguen, dijo Jesús. Decí: paso a paso, voy por más; oigo a Dios; y cuando el velo se rompe soy libre. Lot le dijo: "me voy", y Abraham le dijo: "chau." No le dijo "no me dejes, qué haré, sin tu amor no viviré..." "¿Querés irte? ¿Se fue con una de veinte? Andá, nunca encontrarás una como yo; pero yo encontraré mil mejor que vos... ¡chau!"

 

Saben que en la antigüedad en las fiestas se sentaban en forma de U, y en la curva de la U estaba el principal. Jesús fue a una fiesta y veía como todos se mataban para estar al lado del principal, entonces Jesús les dice: "fíjense lo que hacen, les gustan las primeras filas; ustedes no hagan eso porque si se sientan al lado va a venir alguien que es más importante que ustedes, y el dueño de casa los va a echar. Váyase al fondo que acá vino alguien más distinguido; ustedes siéntense en el fondo." (ésta es una palabra para los que se quedan parados en el fondo hermano). Leí todas las parábolas y descubrí lo que voy a decir ahora, que te va a dinamitar el cerebro. Jesús dijo: "cuando hagan una fiesta invitad a los pobres, invitad a los desamparados, a los que nadie quiere; porque ellos no tienen con qué pagarte." ¿Saben qué les estaba diciendo Jesús? Les estaba diciendo: "la verdadera gente que festeja fiestas es la gente que no necesita el aplauso de nadie, que no necesita el reconocimiento de nadie." Y cuando uno logra eso, que no te importa si te miran, si te aplauden, si están con vos, si te quieren; vos decís: "ahora soy libre de la gente."

 

¿Cuál fue el velo más difícil? Porque hay muchos velos: hay velos económicos ("esto está difícil..."); hay velos familiares, hay velos intelectuales, hay velos espirituales.

¿Pero cuál fue el velo que más le costó romper a Jesús? El velo del Reino . ¿Qué era el reino? Hace muchos años atrás, al rey lo dirigía Dios; pero un día el pueblo de Israel le dijo a Dios: "Señor nosotros no queremos que vos nos reines; nosotros lo que queremos es un rey como los otros pueblos, alguien que nos lidere, alguien que ponga leyes, que nos mande." "Bueno", dijo Dios; y lo levantó a Saúl. Saúl fue el primer rey de Israel; reinó cuarenta años. Pero a Saúl se le subieron los humos, se la creyó, le agarró soberbia, orgullo, y Dios lo sacó. Y Dios puso a otro rey: David. David era un gran rey, pero mataba gente, y al final David mató tanta gente que Dios dijo: "David, fuera; vamos a poner otro rey", y vino Salomón, el sabio de los sabios. Pero al final a Salomón le gustaban las mujeres; mujer que veía, se acostaba... le gustaban todas. Dice que se enamoró de todas mujeres paganas y levantó templos a los dioses de ellas. La historia termina; se divide el reino, tribus para el norte, otras para el sur, peleas; vienen los conquistadores... hasta que aparece Roma, y conquista casi todo el mundo.

 

Entonces, en la época de Jesús, el concepto de reino, era que ellos esperaban un rey terrenal, que le diese un golpe de estado a Roma, matase al César y estableciese el reinado de paz. Cuando Jesús viene, la pregunta que siempre le van a hacer a Jesús es: "el reino del que hablás, ¿cómo es?, ¿le vas a dar el golpe al César, vamos a matar a los romanos, y vamos a gobernar la tierra?" Ellos tenían un concepto material del reino, pero Jesús no tenía ese concepto de reino. Y entonces Jesús les daba de a cucharita, porque les tenía que romper el concepto -el velo- de que el reino no era material, sino espiritual. Cuando Jesús multiplica los panes -que hablé el domingo pasado- y le da de comer a los diez mil, ¿qué hace la multitud...? "vamos a coronarlo rey; si éste hace estos milagros, al César lo matamos, agarramos las armas y lo matamos", porque ellos tenían ese velo, esa idea equivocada. Cuando Jesús les dice: "muchachos me voy a morir, me voy a la cruz, voy a resucitar, y voy a establecer mi reino", los discípulos empezaron a pelear por quién se iba a sentar a la derecha y a la izquierda de Jesús, cuando haga el golpe de estado quién iba a ser 'jefe de las fuerzas armadas', quién iba a ser 'ministro de cultura', 'ministro de educación'... "yo voy a ser; a mí me eligió primero"; "pero yo hice más milagros." Y Jesús les dice: "¡¿qué están haciendo?! No; en mi reino, el que quiere ser el mayor, que sirva." El pueblo no entendía nada... "¿cómo que sirva?" Judas robaba del tesoro. ¿Por qué Judas vendió a Jesús...? Porque Judas fue el primero que se avivó que el reino no era terrenal, que Jesús no iba a hacerle un golpe de estado al César; Judas seguía a Jesús porque dijo: "si yo soy tesorero y me robo la plata que hay acá, cuando Jesús haga el golpe de estado... ¡me ponen de ministro de economía y me robo todo!" Pero cuando Judas entendió que Jesús no iba a hacer un golpe de estado, pensó: "¡perdí tres años para nada! ¡Me engañó! ¡Lo voy a matar!" Por eso fue y lo vendió. Ó sea... ¿cuál era el concepto? -y acá vamos a lo mejor- El concepto que ellos tenían del reino era: si cambia el afuera todo cambiará.

 

Pero el nuevo concepto de reino que Jesús les trajo era: si yo me cambio por dentro, vos vas a cambiar todo tu afuera en bendición. El concepto de ellos era: "Señor, volteá a Roma, a César; y entonces estaremos bien", y Jesús le dijo: "No, eso es humano; yo te voy a cambiar a vos, te voy a llenar de mi Espíritu y voy a establecer mi gobierno en tu vida; y donde vos vayas, vas a ser como el sembrador: vas a tirar mi Palabra a todos lados, a todas las personas. No vas a discriminar al pobre, al rico, al loco, al débil, al fuerte." Porque el reino de los cielos es como un sembrador que echó semilla, y algunas cayeron en mala tierra; no te eches la culpa, la tierra es mala, pero echó en todos lados. Dios va a llenar tu corazón y donde vos vayas vas a sembrar su semilla, su Espíritu Santo. Porque no es: "Señor, cambia nuestra ciudad", es: "Señor, si vos me cambiás a mí, si tu gobierno está en mi corazón, y vos me llenás." El reino... ¿a qué lo compararé? A uno que tira la red y agarra toda clase de peces... ¡eso es lo que estamos haciendo 'Presencia de Dios'! Yendo por todos lados, a las cárceles, hospitales, a los de Coca Cola, a los de Pepsi, a los ricos, a los pobres; eso es lo que vos estás haciendo en tu trabajo: estás sembrando, porque si Dios te cambia a vos, vos vas a traer el gobierno, el reino, así como en el cielo, lo vas a traer a tu tierra. Porque si Dios te llena de Él, vos serás de bendición donde estés.

 

"¿A qué compararé el reino de los cielos...?" Me leí todas las parábolas del reino. Los hombres no entendían nada, porque cuando Jesús les decía reino, ellos le decían golpe de estado; pero Jesús decía: "te voy a dar el golpe a vos, para que seas lleno de mí. Dejá de pedirme que cambie a los demás; si yo establezco mi poder en vos y dejás que te llene del poder de mi presencia, vas a ser sal y luz."

Vos sos un ciudadano del reino; antes estábamos en el reino del diablo, con velos; pero fíjense que -hasta que Jesús resucitó y hasta después de haber resucitado- los discípulos no entendieron nada; porque cuando está resucitado le dicen: "Señor, ¿restaurarás el reino de Israel?" Y Jesús dice: "menos mal que me voy, y les mando el Espíritu Santo... no les toca a ustedes saber eso; ustedes dejen que yo los llene." Porque el reino de los cielos es como una mujer que estaba amasando, pero agarró la levadura y la mezcló con la masa, y entró a amasar; y la masa entró a fermentar. Yo quiero decirte que Dios te está amasando y te está amasando con el Espíritu Santo; y a veces te estira y de pronto ¡pa, pa, pa!... y de pronto vos cambiás. Te está amasando con el Espíritu Santo, y te va a meter en tu lugar de trabajo para que lleves la levadura del Espíritu Santo y la mezcles. Porque esta sociedad no da para más, hermanos. La tierra gime para que los hijos del Rey digan: "esta tierra va a ser bendecida, yo voy a bendecir a Argentina, será tierra de justicia de paz, de igualdad de bendición y tierra de la presencia de Dios."

 

Ahora viene lo mejor, para el final, y con esto que leí acá no pude dormir. Se acuerdan lo que es el reino: cuando Dios me gobierna a mí; si Dios cambia el adentro para que yo bendiga el afuera. Vos estuviste orando por tus hijos, estuviste orando por tu familia y Dios te dice: "pará; mejor orá por vos; déjame que yo te gobierne, déjame que yo te llene, déjame que yo te dé mis leyes y donde vayas, donde mires Abraham, te lo daré.

Esto es lo mejor, me bendijo mucho. El reino de los cielos es como un tesoro escondido en un campo; cuando un hombre lo descubrió, lo volvió a esconder y lleno de alegría vendió todo lo que tenía y compró el campo.... tesoro. El hombre en la antigüedad, como había mucha guerra, los tesoros los guardaban debajo de la tierra; pero algunos lo perdían o se olvidaban dónde estaba, o se morían. Un día viene uno y tropieza... "hay una piedra acá... ¿quién la puso acá?" Cuando saca la piedra, era una moneda; mira a los costados... "¡debe haber más...!" Escarbó con la manos... ¡y más monedas! Consiguió una pala, y encontró un tesoro; pero el tesoro no se lo podía llevar porque pertenecía al dueño de la tierra. Lo escondió; fue a la casa: "¡vieja: vendé los zapatos, vendamos los muebles!" "¿Qué te pasó...?" "Vendé las doscientas polleras que tenés, vendé los trescientos perfumes", vendió todo. Fue a la inmobiliaria y le dijo: "quiero comprar ese terrenito que está ahí abandonado, para hacerme una casita, para mí, para hacer la cucha del perro... jeje..." (¡Papá! cuando levantes la plata que hay ahí...) Y vendió todo; y agarró el tesoro. ¿Sabes qué es el tesoro? La presencia de Dios.

Cuando te topas con la presencia vendes todo. Stephen Covey dice: "no vi ni un moribundo decir: me muero, qué lástima; me hubiese gustado trabajar un poco más..." Cuando te encontrás con la presencia de Dios, ese es el tesoro, vendés todo. Decí: esto es lo mejor que me pasó en la vida; conocerlo a Él, que Él me gobierne, que Él sea mi rey, que yo sea su hijo, nada se compara a eso. El hombre iba caminando y se tropezó, como muchos de ustedes, vinieron a un grupo de autoayuda y se tropezaron con la presencia de Dios. En Olimpo me dice un joven: "¿sabes quién soy yo? Soy uno de las charlas que vos fuiste a dar; me encontré con el Señor". Algunos de ustedes vinieron acá para criticar, y se encontraron con la presencia de Dios. Otros vinieron desahuciados, buscando un toque mágico, y te tropezaste. Fue como el pastor Boeykens, cuando vino la primera vez, alguien le oró y descubrió al Señor. Él es el gran tesoro.

 

Pero cuando termina la parábola les cuenta otra, y dice: "¿saben cómo es el reino? El reino de los cielos se parece a un comerciante que andaba buscando perlas finas; cuando encontró una de gran valor, fue y vendió todo lo que tenía y las compró. Parece la misma parábola, pero no es la misma. Porque la primera se la dijo a todos. "Hay personas que se tropiezan y descubren al Señor"; pero después se llevó a los doce íntimos de Él: "vengan muchachos; para ustedes tengo otra parábola el reino. Esto es para nosotros: el reino se parece a un profesional que estaba buscando una perla preciosa." El otro -el del tesoro- lo descubrió de casualidad; éste no, éste está buscando una relación más profunda con la presencia de Dios. "Yo no quiero el tesoro, yo ahora quiero la perla, yo ahora quiero una intimidad con Él, como nadie jamás tuvo; yo soy un comerciante, soy un buscador, yo no soy uno que tropezó; eso fue antes, ahora yo quiero la perla, yo quiero una revelación fina, yo quiero una relación extraordinaria, yo soy un buscador de perla." Esa es la gente que establece el reino de Dios.

 

¿Qué te parece si en esta noche nos transformamos en buscadores de la presencia? ¿Qué te parece si en esta noche le decís: "Señor, no me alcanza con conocerte, yo quiero tocar tu corazón; no me alcanza con cantarte, yo quiero entrar en tu habitación; no me alcanza con alabar, yo quiero oler tu perfume, yo quiero esa perla, yo no estoy para un tesoro, yo estoy para algo especial, yo estoy para algo profundo, para algo hermoso que quiero lucir en mi vida, que quiero colgar." Esa es la gente que va a cambiar la ciudad, esa es la gente que va a llenar la tierra de la gloria, esa es la gente que en esta noche dice: "yo quiero más, yo quiero más."

 

Cuando Pedro levantó la espada, le cortó la oreja al criado en Getsemaní.... ¿saben por qué la gente no oía de Dios? Porque cuando la iglesia levanta la espada, le corta la oreja las personas, y así la gente no puede oír. Pero Dios está levantando gente buscadora de perlas, que no tienen espada para cortar orejas, tienen espada para cortar velos, y tienen pan para dar de comer. Me dijo el Señor: "Bernardo, cuando Pedro predicó y ganó tres mil y luego ganó cinco mil, no fue por el sermón, fue por lo que él tenía; a la gente no le importan tus palabras, la gente va a querer la perla que está dentro tuyo, la búsqueda que has hecho del Señor." Dios nos va a bendecir grandemente; no somos de los que no tropiezan, somos de los que buscan la perla profunda de la intimidad con Papá; somos la gente del reino, somos la sal de la tierra, somos la luz de este mundo. Dios le dijo: "levanta la vista porque te daré Abraham, desde el lugar donde estás", le dijo: "te daré del norte, del sur, del este y del oeste" ...enseñanza: de donde mires Dios te va a dar bendición; si vas al norte, bendecido; si vas al sur, bendecido; si vas al este... porque vos no te encontrás de casualidad con un tesoro; vos sos un buscador de perlas preciosas. Dios le dijo: "Abraham, te daré todo lo que puedas ver."

 

Hoy Dios va a rompernos los velos que faltaban, y todo lo que veas, todo lo que veas, hasta allí Dios te dará; y Dios te hará ver tu sueño, tu familia bendecida. Dios hará ver tu prosperidad, Dios hará ver tu casa en gloria; y hasta donde veas, hasta allí te daré. Porque se viene iglesia; el reino ya está aquí. Se viene la bendición, hasta donde veas, hasta allí llegaré. El reino está creciendo, y un día el Señor va a volver otra vez; y cuando Él venga, Él será el Rey de todos sus hijos. Y falta menos; la Biblia dice: "vengo pronto", y cuando Él venga dice la Biblia que 'no habrá más maldad, no habrá más llanto'; no va a haber más policía, ni hospitales, no va a haber más psicólogos, no va a haber más dentistas, terapia intensiva; no va a haber más medicamentos; seremos como Él. Pero mientras tanto vamos a cambiar nustra atmósfera. No importa que Lot se fue; donde vayas -Dios le dijo a Abraham- "recorre toda la tierra porque te la daré." Caminña en paz; donde vos estás y donde pises decí: "Señor, yo establezco tu gobierno acá, en mi trabajo, en mi casa, no reina el enemigo.

 

Cancelamos todo espíritu de muerte, atamos todo espíritu de muerte, ato todo espíritu de secuestro, de droga, seco toda obra del enemigo; cancelamos de los hijos de Dios toda estrategia del enemigo en contra nuestro, todo espíritu de accidente, lo amarramos, lo atamos, y desatamos la bendición, desatamos el éxito, desatamos la fe. Nos llenamos de ti Señor, y declaramos que vos sos el rey de nosotros, y a través de nosotros Argentina será bendecida... ¡¡¡¡amén, amén y amén!!!

 

Bernardo Stamateas

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